Que en España se haya producido cierto progreso en la educación en los últimos 30 años es un hecho, pero aun nos queda mucho camino por recorrer para llegar a un sistema ideal.
Entre los problemas que debemos afrontar está el índice de abandono escolar, que es elevado en enseñanzas obligatorias, siendo ineficaz para algunos adolescentes terminar la ESO debido a distintas características socioculturales o económicas.
Aquí es donde entran las escuelas de segunda oportunidad, permitiendo que estos adolescentes puedan volver a intentar entrar en un sistema no diseñado para ellos, primando el individuo por encima de los planes de estudio.
En ellas, se trabaja para conseguir que los alumnos salgan de un ambiente de fracaso y se les enseñe que tienen capacidad para realizar lo que se le venga encima.
Aunque tenga algo de tiempo, un documental que habla sobre ello es «Un pulso al fracaso«, que dejo enlazado aquí y que recomiendo encarecidamente ver, ya que explica perfectamente la situación.
Noches de Serano 
Aún queda mucho que hacer, pero hay esperanzas! Buen trabajo, 😉